No le gusta cocinar, eso se lo deja a su marido… pero nos recibe a las 9.30 de la mañana, con cruasanes, café y flores.
Así es ella, detallista, amable y extrovertida. Nos ha abierto la puerta de su casa y ha compartido con nosotras no sólo 4 risas, sino pedacitos de su vida, de su familia y de su pasión.
Neus es inquieta, curiosa, activa y romántica. Independiente, soñadora, realista y apasionada. Trata cualquier detalle como un todo, porque todo es importante. Guarda como tesoros las manualidades de sus hijos, sus muebles cuentan historias con marcas de tijera, pegamento y celo. No sé cómo describirla, y eso es raro en mi porque normalmente encuentro las palabras, pero es que ella es así: una chica bonita…. pero no de esas de cara bonita, que también, sino de alma bonita.
Los ojos le brillan cuando habla de sus hijos, de su madre, de su hermana o de el último evento que hizo. Busca horas a los minutos para aprovecharlos al máximo, no teme a nada, o sí, pero tampoco lo piensa… ella sonríe al pensar en lo que quiere hacer, y envuelve a los de alrededor para que lo hagan, porque la unión hace la fuerza y, si es con buen rollo, mejor… Supongo que así nació Nucli: una empresa de comunicación que ofrece servicios especializados en asesoramiento, eventos (…) una empresa feliz con 3 ejes: Neus, Ketty (su madre): el pilar, la base, el todo y Ketty (su hermana): tímida, realista y con los pies en tierra pero que complementa la personalidad de Neus. en varias ocasiones se refiere a ella como el Yin y el Yang…
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Que no os engañe su sonrisa o su habilidad para hacer las cosas fáciles. Detrás de esa armonía hay muchas horas de esfuerzo, de sacrificio y de sentarse a pensar. Nadie consigue algo (y me refiero a ALGO sólido) sin trabajo duro, preparación, vocación y determinación – madre mía, todo acaba en «ción» 🙂 –
De pequeña soñaba con tener su propia mercería, y ha terminando con su propia empresa, haciendo los eventos que le salen del corazón y un proyecto que supera cualquier aspiración, empresa, trabajo o sueño: ha terminando siendo dueña de si misma, sabiendo lo que quiere, hacia dónde quiere ir y con quién. No es que eso lo haya dicho ella, no. Ella respondía -con esa sonrisa que le sale del alma- sobre sus años de formación en Madrid o Londres, de su trabajo y sus rutinas… sin darse cuenta de que hablara de lo que hablara terminaba enlazándolo con el amor que tiene hacia su madre, su hermana o sus hijos/marido… Daba igual el tema que tratáramos, sin darse cuenta lo hilaba con una anécdota de alguien de los suyos. Siempre he creído que para poder dar un paso a delante y alcanzar lo que uno quiere es básico estar en paz. Que los odios, los rencores o las mentiras nos son compatibles con el crecimiento personal y que si das sin esperar nada a cambio salen cosas buenas. Después de estar con ella, me reafirmo en mi opinión. Ella es todo eso. Vive cada día como un ahora y no agobiada por lo que está por venir… sólo así puedes estar con flores frescas, café recién hecho y bollos en la mesa a las 9 am. esperando a que dos locas entren en tu casa con ganas de conocerte
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La idea de este proyecto (4 risas 2 versiones) es contar desde 2 puntos de vista cómo vemos la realidad Elena y yo… intento no leer su parte antes de tener terminada la mía para evitar influencias,. Tengo curiosidad de ver la conclusión de la de ella, pero la mía la tengo clara: salí de la casa de Neus con una sonrisa, con paz y con ganas de hacer un mundo mejor. Salí con ganas de ver a los míos, de llamar a mi madre y de decirla cuánto la quiero; con ganas de pintarme los labios, ir conjuntada y cuidar los detalles. Salí agradecida, porque llevaba 2 horas viendo a una persona positiva, entusiasta, con ganas de más – Salí feliz por haberme tomado hace unas semanas esos vinos con Elena y haber decidido hacer esto. Muchos de vosotros me preguntáis si estas entrevistas no me quitan tiempo del día a día… pues no. No me lo quita, me lo da. Tiempo de conocer gente nueva, de poder escribir, de hacer fotos y de estar conmigo misma. Tiempo invertido en compartir… y eso, siempre es bueno.